Sunday, December 30, 2007

Duele

Hay momentos en el año (y principalmente cuando va terminando, o sea, ahora) en los que me siento realmente dolorido de vivir en este país. No voy a abundar en adjetivos destructivos, porque a pesar de que me brotan hasta por los poros es un recurso que cansa y alimenta más este dolor.
Yo no sé hasta qué punto va a llegar todo esto. Socialmente este país está quemado más allá de la recuperación. Salir a la calle es un suplicio por el total desinterés de cada uno respecto del otro. Esto se ve clarísimo en la manera de manejar, en la cola de la caja del supermercado, en los fiambres que deja la gente entre las gaseosas, en la atención de los mozos, en los horarios de los cines, en el estacionamiento, en las tiendas... En tantos lugares.
Ayer noté que la vida en Argentina demanda una constante preparación al conflicto, porque siempre aparecerá algún problema en el que haya que discutir con alguien. Esto hace que uno se desgaste más rápido en el año y piense en no salir nunca más de su casa, viviendo del delivery. Lamentablemente hasta con el delivery uno suele pelearse por las largas demoras y hasta la entrega de pedidos diferentes a los que uno hizo.
Es decir, estoy acorralado y no tengo escapatoria más que desarrollar algún grado de adaptación a este caos impresentable, de manera de no terminar muerto con un ACV masivo en los próximos meses.
Eso de que el argentino es solidario es bull shit, patrañas. O sea, en cuestiones puntuales y de mucho movimiento mediático sí lo es. Cáritas logra buenas colectas y cuando hay que buscarle un riñón a una nena varios se mueven. Pero eso no es solidaridad. La verdadera se ve en el día a día, y esa es nula.
Quiero ser justo: hay todavía varios lugares en el país donde la gente mantiene un nivel solidario muy bueno y una convivencia social que permite mantener la esperanza. Esto generalmente ocurre en pueblos del interior, que son muchos. Las ciudades están totalmente quemadas, así que hay que huir de ellas.
O huir de aquí.
O adaptarse.

Cine para la masa


Ayer fuimos al cine a ver Bee Movie. Se las recomiendo como una de las mejores de animación de 2007.
Lo que me llamó la atención fue que finalmente llegó el día que supe iba a llegar: no había versiones subtituladas. El argentino en general es bien vago y no le gusta andar leyendo, más allá de que lee mal y lento y se le escapan algunos títulos. Además, la gente en general (y mucho más los niños) no captan el sabor verdadero de las películas en idioma original. Y eso es una lástima verdaderamente. Muchos gags se pierden al no escuchar la voz en inglés original, además de la ausencia de giros específicos que los actores y autores imprimieron en sus personajes.
Entiendo a los cines. Para qué pagar dos cintas si la gente verá sólo una. Tanto Village como Showcase tenían sólo versiones en castellano de Bee Movie, que originalmente tiene voces de Jerry Seinfield y Renée Zellwegger, entre otros famosos (¡hasta está Oprah!).
Por esta razón de los idiomas desistimos de ver La Brújula Dorada, ya que ahí sí será un plomazo ver a los actores diciendo "¡Ten cuidado! Ve por este camino".

Saturday, December 8, 2007

Refrescando los discos

La computadora de mi esposa es una antigua pero fiel Pentium/III de 750 MHz.
Fue mi computadora antes de saltar al P4/1800 que hoy está en manos de mi padre. Si bien me encantaría actualizarla, cuestiones monetarias impiden siquiera aumentar la RAM a más de 256 MB.
Tiene dos discos. Uno de ellos es un Maxtor de 15 GB que siempre fue muy calentón, por lo que la mejor manera de utilizarlo es con un par de fans atornillados a la parte baja. El problema es que el gabinete de este P3 es común y tiene una jaula de discos diminuta de dos espacios, dejando poco lugar para flujo de aire y haciendo imposible instalar los fans.
Por esa razón y si bien el arreglo quedó improvisado por falta de tiempo, construí una "expansión" a la jaula para que los discos estén más separados y haya espacio para los fans del Maxtor. El resultado es que los discos están mucho más frescos, por lo que su vida útil no se verá afectada.
Igualmente, el otro disco (un WD de 5.1 GB) está mostrando signos de vejez puesto que sus valores SMART han bajado.

Extraño visitante

La otra noche, Betiana salió a regar las plantas y se encontró con un extraño visitante parado en una ramita.
No tenemos idea de qué pájaro se trata, pero luego de dos días se fue. Se movía bien y no parecía herido. Igualmente, le dí comida y agua como para mostrarle hospitalidad.